Se termina el año, un año horrendo en muchos aspectos, no tanto en otros. En cuanto a Nada, se trató del año más prolífico de nuestro espacio en nuestros 5 años de existencia. Además, el único en el que no pasó un solo mes sin que se publicara algo, lo cual no es poco si tenemos en cuenta la proverbial inestabilidad de nuestro director. Aunque seamos descreídos, encarnamos una especie de contradictorios nihilistas utópicos, así que esperamos, a pesar de que el flujo del tiempo es constante y poco importa el calendario Gregoriano, que el 2013 sea más amable. Lectores, saludos y los mejores deseos para ustedes, y el año que viene le contamos cómo fue la dionisíaca fiesta de fin de año de la Redacción.
Adiós, 2012, y no vuelvas.
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1 comentario:
11 - 1 ??
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